Después de más cien años de existencia y de una actividad coral que abarca tres siglos, el Orfeón Pamplonés ha evolucionado profundamente, convirtiéndose a día de hoy en una compleja organización social dotada, entre otras cosas, de una significativa relevancia tanto cultural como pública, de una potente estructura profesional, de una prometedora sección de coros jóvenes y, también, de un importante presupuesto económico y financiero con el que cumplir sus fines societarios.

Pero si decimos que el Orfeón ha cambiado, y mucho especialmente a lo largo de la última década, no lo ha hecho menos su entorno, la misma sociedad y, por supuesto, el marco legal que regula las asociaciones civiles, todo lo cual exigía una importante revisión de nuestros Estatutos con el fin de dotarnos de un instrumento normativo que, además de riguroso y completo, pudiera ser válido y eficaz para solventar los problemas sin conflictos.

Desde un punto de vista puramente legal, cabe destacar que los presentes Estatutos no son sólo resultado de un profuso estudio de la legislación vigente, sino que también de la jurisprudencia y doctrina de nuestros tribunales de justicia, siendo lo cierto que lo mismos han sido elaborados a la vista del artículo 22 de la Constitución Española de 1978, relativo al Derecho Fundamental de Asociación, y de la Ley Orgánica 1/2002 de 22 de marzo, Reguladora del Derecho de Asociación, que establece las líneas básicas de organización, funcionamiento, garantías jurisdiccionales, derechos y obligaciones de las asociaciones y sus asociados.